Uno de los gastos más importantes en las granjas son los costes eléctricos. Apostar por energías renovables no sólo produce beneficios medioambientales, sino que también baja de manera considerable la factura de la luz.
Estos días participamos en una jornada técnica organizada por la Oficina Agraria Comarcal de Lugo en la que explicamos cómo se pueden emplear las distintas tecnologías disponibles para reducir el gasto energético en las granjas, donde la mecanización y automatización de los distintos procesos ha incrementado también el consumo eléctrico.
En las explotaciones lácteas, más del 50% del consumo eléctrico está motivado por el sistema de ordeño y el enfriado de la leche, ya que el funcionamiento de las bombas de vacío equivale al 33% del consumo total de la granja y el tanque de frío supondría otro 22%.
Variadores de frecuencia
Mediante la instalación de sistemas sencillos, podemos lograr grandes ahorros en el ordeño. Una opción interesante son los variadores de frecuencia, que reducen el consumo eléctrico de los motores y alargan su vida útil. El sistema evita que la bomba de vacío funcione por encima de las necesidades de ordeño, lo que contribuye además a mejorar la salud de la ubre de las vacas y a reducir el estrés de los animales durante el ordeño
Intercambiadores y recuperadores de calor
Otra posibilidad son los intercambiadores y recuperadores de calor, que nos permiten preenfriar la leche antes de su entrada al tanque de frío, obteniendo simultaneamente agua caliente para las posteriores tareas de lavado del sistema de ordeño.
La limpieza tanto de la sala como del tanque de frío debe hacerse con agua a una temperatura entre 60 y 70ºC y esto supone un gran consumo de energía. Calentar un metro cúbico de agua a temperatura de lavado tiene un coste de entre 4 y 10 euros, dependiendo del combustible empleado. Usar un termo eléctrico para eso resulta muy caro, pero la instalación de captadores (paneles) solares térmicos permite bajar ese consumo eléctrico un 20%.

Calderas de biomasa para granjas de carne
En las explotaciones que necesitan climatización, como es el caso de las granjas de pollos, pavos y cerdos, las placas solares térmicas servirían también, con un sistema de apoyo, para lograr la temperatura de pruducción idónea . Estos sectores de ganadería de carne intensiva son grandes consumidores de energía para climatización y en este caso la energía geotérmica y la biomasa son una buena alternativa. Los pélets, por ejemplo, suponen un ahorro del 50% con respecto al gasóleo y del 60% en relación al gas propano.
Junto a los captadores solares térmicos, el aprovechamiento eléctrico de la radiación solar por medio de paneles fotovoltaicos es ya cada vez más una realidad en las explotaciones gallegas.
La aprobación este año del Real Decreto 244/2019, que regula el autoconsumo de energías renovables, ha simplificado los trámites, lo que facilita la instalación de paneles fotovoltaicos, que son muy recomendables en el caso de granjas que han optado por introducir robots de ordeño.
Subvenciones
Cualquier inversión en eficiencia energética es rentable en sí misma. Pensemos que algo tan sencillo como la instalación de luces led permite un ahorro del 50% en iluminación. Lo mismo sucede con las energías renovables, pero hay que tener en cuenta además que existen ayudas del Instituto Enerxético de Galicia (INEGA) para la instalación de sistemas de energías renovables. Estas ayudas pueden llegar a cubrir hasta el 55% del coste total.
Si queréis conocer más en detalle qué soluciones se pueden adoptar en vuestras explotaciones ganaderas para reducir el coste eléctrico, no dudéis en consultarnos. Somos una empresa de biomasa en Galicia con muchos años de experiencia a nuestra espalda.
También podéis leer este artículo en profundidad en el que explican cómo funcionan las distintas tecnologías y sus posibilidades en granjas.